Principales características
Árbol de hoja caduca, monoico, de hasta 45 m de altura, con la copa abombada, cupuliforme, con las ramas muy retorcidas, ascendentes y extendidas.
Tronco
Muy ramificado, frecuentemente nudoso e irregular.
Corteza
De color grisáceo claro, con muchos surcos predominantemente verticales.
Hojas
Alternas, de hasta 15 cm de longitud, con 4 a 5 lóbulos redondeados e irregulares a cada lado, el haz es verde brillante, el envés más claro. Poseen un peciolo muy corto (no llega a 0.8 mm)
Flores
Las masculinas en amentos muy delgados de hasta 4 cm de longitud y verdosas, las femeninas terminales en los brotes nuevos, de hasta 5 cm y pardas, florece en mayo y en junio.
Frutos
En glande, de 2 a 3 "bellotas" ovoidales y largas sobre un pedúnculo de hasta 8 cm.
Hábitat
Es una especie muy importante autóctona de los bosques europeos, su madera es muy apreciada. En muchas partes de España los robledales desaparecieron con la agricultura extensiva y en el noroeste español los bosques de robles que quedaban se han ido sustituyendo por eucaliptos y acacias, todo ello ha supuesto un empobrecimiento del ecosistema con la consiguiente pérdida de biodiversidad, una auténtica catástrofe ecológica.
-----Aunque es considerado popularmente como de crecimiento lento, crece rápidamente, alrededor de 60 cm anuales y puede alcanzar edades superiores a los 1000 años.
Frecuentemente los robles presentan "agallas" o "cecidias" como las de las dos últimas fotografías. Son formaciones tumorales producidas por insectos. Generalmente las de los robles se deben a la puesta de un huevo de un himenóptero del género Cynips, el árbol, para defenderse, fabrica esa estructura tan característica, en cuyo interior, se encuentra el huevo o la larva del insecto. Antiguamente estas agallas se empleaban para obtener tintes.